“El grado de fortaleza, de movilización y de ganas del PSOE es el más alto desde hace muchos años; y todo el terreno del cambio y de la innovación está en manos del PSOE, porque el PP y Rajoy no ofrecen ninguna idea de futuro ni de renovación”.
“Para ganar unas elecciones, la primera condición es una identificación razonable de la gente con el candidato y, la segunda, es ganar la opinión de que vas a hacer un Gobierno mejor que el que hay. En esa tarea me he empeñado con intensidad, haciendo un programa sólido y renovado, poniendo todo un equipo de personas de la máxima solvencia que pueden estar en la gobernación y desarrollando, junto con la idea de cambio, la de «buen gobierno». Éste es para mí un concepto importantísimo y sobre el que tengo toda una agenda de propuestas concretas y de ideas novedosas en la política española”.
“Para ser presidente hay que tener la valentía de salir al centro de la plaza, no refugiarse en el burladero”.
“Tengo la mejor hoja de servicios de lealtad como dirigente político desde la Transición”.
(Desde el PP le hacen tres críticas básicas a las que querría que contestara. La primera es que la economía se iría al garete y habría más paro.
“Es ridículo de todo punto. El programa económico del PSOE responde a principios de estabilidad, solvencia, buen orden económico y una orientación distinta, que busca mayor productividad y una economía que se centre más en la competitividad en lugar de hacerlo únicamente en la especulación inmobiliaria y el ladrillo. Hemos presentado un catálogo de principios de buen gobierno: austeridad, con el compromiso de reducir en 200.000 millones de euros el gasto de la Administración del Estado; estabilidad presupuestaria, no aumento de la presión fiscal, transparencia, independencia de los órganos reguladores, gasto público del orden del 40 por ciento del PIB y apoyo al pacto de estabilidad de la UE. Con esos principios y con esa nueva orientación la economía puede y debe crecer más y mejor, sobre todo para aumentar nuestro capital tecnológico, reforzar nuestra industria y convertir en estable tanto empleo precario”.
(Segunda acusación: España se desmembraría).
“El PSOE gobernó trece años y demostró su gran capacidad para la cohesión territorial de España, con desarrollo autonómico y estabilidad. Si tengo la responsabilidad de gobernar, volverá la paz territorial y la cohesión ¿Por qué? Porque haré una política de Estado y no de partido en torno a la unidad de España, y porque facilitaré el diálogo. Necesitamos una etapa de reformas en el funcionamiento de la estructura territorial del Estado y favoreceré el desarrollo autonómico con reformas consensuadas de los Estatutos en el marco de la Constitución”.
(Tercera acusación: Gobernaría con Llamazares y Carod-Rovira).
“Sólo formaré Gobierno si el PSOE es el partido más votado. Mi objetivo, mi propósito y mi convencimiento es hacer un Gobierno sólo con gente del PSOE y con independientes, compatible con el diálogo y los acuerdos parlamentarios. Si ganamos, mi petición a los grupos que quieran apoyar mi investidura va a ser que quiero un gobierno autónomo del PSOE”.
“Pido el voto de cualquier persona que, con independencia de cómo se sienta ideológicamente, quiera un cambio, otro talante, buenos comportamientos democráticos, asunción de responsabilidades, no mentiras... Pido el voto para el cambio y eso significa un Gobierno que escuche y tenga capacidad de entendimiento”.
“En el 82 se trataba de consolidar la democracia y ahora de renovarla. En el 82 se trataba de poner los cimientos de la modernidad y ahora de liderar la modernidad. En el 82 se trataba de ir a Europa y ahora de entenderse con Europa. En el 82 se trataba de abrirse al mundo y ahora de tener en el mundo un papel que apueste por la cooperación internacional en lugar de la sumisión a Bush. En el 82 se trataba de crear un Estado de Bienestar y ahora de hacerlo de más calidad y más eficaz. Hay una similitud en el aliento de fondo y es un impulso nuevo. Tenemos un partido en el Gobierno que no se ha entendido con nadie y un Gobierno que no se entiende con la sociedad no tiene capacidad de liderar cambios”.
“Tenemos en lo político un gran socavón de malas prácticas democráticas. En lo económico tenemos baches que hay que remediar y en lo social un retraso evidente respecto de la UE. Y en la política exterior tenemos un cráter como consecuencia del error más grave que ha cometido el Gobierno, que fue la apuesta por la guerra en Irak”.
“Los programas deben responder a las grandes ideas de por dónde quieres llevar al país. El PP parece que ha hecho su programa en un casino porque decir que va a poner 34.000 policías más después de que los haya reducido en 10.000 no tiene credibilidad.”
(Pero ha hecho promesas que se antojan utópicas, como que TVE sea plural e independiente, porque siempre se dice y nunca se cumple).
“Mi compromiso es que un grupo de personas independientes y de relevancia social definan el modelo y las reglas de funcionamiento. Me he comprometido personalmente con ellos y públicamente con toda la sociedad a aceptar lo que digan. Nadie en democracia ha asumido un compromiso así”.
“Me conozco muy bien y sé cuáles son mis valores vitales ¡Desprecio tanto la arrogancia...! Creo firme e íntimamente que la humildad, el respeto a todos, la tolerancia... son cosas que tienes que demostrar más cuanto más poder tengas. Ésa es la grandeza de un liderazgo. La soberbia y la prepotencia es lo que más desacredita los liderazgos porque, a la postre, todos los liderazgos políticos, todos, más allá de las cualidades personales, son fruto del apoyo de la gente”.
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